De acuerdo con el artículo 35 de la Ley Aduanera (publicada en 1995 y reformada en 2021), el despacho aduanero se define como:
“El conjunto de actos y formalidades relativos a la entrada de mercancías al territorio nacional y a su salida del mismo, que de acuerdo con los diferentes tráficos y regímenes aduaneros establecidos en el presente ordenamiento, deben realizar ante la aduana, las autoridades aduaneras y quienes introducen o extraen mercancías del territorio nacional, ya sea los consignatarios, destinatarios, propietarios, poseedores o tenedores en las importaciones y los remitentes en las exportaciones, así como los agentes aduanales o agencias aduanales, empleando el sistema electrónico aduanero.”
Según la legislación mencionada, quien establece las reglas mediante las cuales se realizará el despacho aduanero es el Servicio de Administración Tributaria (SAT).
Basándonos en esta definición, el despacho aduanero tiene un gran impacto en la economía de nuestro país ya que permite la entrada y salida de las mercancías de todo el mundo a través del comercio internacional.
Por su parte, es importante advertir que no se debe confundir “actividad aduanera” con “despacho aduanero”, ya que este último constituye únicamente una fase de la primera. Durante el procedimiento legal que implica el despacho aduanero, se permite el desaduanamiento de las mercancías de comercio exterior.
De acuerdo a las modalidades del despacho aduanero existen tres categorías que explicaremos a continuación:
1. Despacho anticipado
El despacho anticipado es la modalidad de importación que posibilita que las mercancías puedan ser declaradas antes de que su medio de transporte toque el territorio nacional.
Lo que se busca en este caso es mejorar el ingreso y salida de mercancías del país, aumentando la fluidez, la agilidad, la reducción de costos, la entrega de productos de forma acelerada y la seguridad nacional.
2. Despacho urgente
El elemento característico por excelencia del despacho urgente es la determinación del tipo de mercancía que puede gozar de estas facilidades. Es sumamente importante hacer hincapié en que los envíos de socorro con considerados como despachos urgentes.
3. Despacho excepcional
Esta modalidad permite demandar el destino aduanero hasta el plazo máximo de 30 días posteriores a la fecha del término de la descarga. De acuerdo con la legislación aduanera, transcurrido ese plazo, la mercancía sólo podrá ser sometida al régimen de importación para el consumo.
Además, en el supuesto de que la mercancía no haya sido sometida a ninguna destinación aduanera, el despacho excepcional cuenta con la posibilidad de que la misma incurra en abandono legal al vencimiento de los 30 días posteriores a la descarga.
Durante la práctica y aplicación del proceso de despacho aduanero, se deben considerar ciertos requerimientos a cumplir respecto a la entrada al territorio nacional y la salida del mismo de mercancías de importación y exportación.
Además, se deben tener en cuenta las obligaciones y requisitos legales que los medios de transporte en que se conducen las mercancías deben cumplir, las maniobras de carga y descarga de las mismas.
Según la legislación vigente, el procedimiento del despacho aduanero es el siguiente: